Soy Mavé, psicóloga

Me llamo Mari Carmen y soy una personita que a veces se siente igual de perdida que tú en la vida.  

No sé si muchos profesionales de la salud, en especial de la salud mental, serán tan honestos como he sido yo en estas primeras líneas, pero es que me parece esencial admitir abiertamente que no pretendo ser un modelo conductual y emocional ideal que idolatrar y alcanzar, sino que pretendo ser lo que soy: un ser humano que siente y piensa igual que tú, que es capaz de comprenderte, de empatizar contigo y que está preparada profesionalmente para acompañarte en tu proceso de bienestar psicoemocional.

Todos tenemos y/o pasamos por dificultades, problemas familiares, procesos sentimentales, heridas emocionales, exigencias y/o frustraciones personales, retos laborales, … que nos hacen mella, que nos afectan, que nos hacen dudar de nosotros mismos y de nuestra capacidad para hacer frente a las demandas del mundo en el que vivimos y de la vida que a cada uno le toca transitar.  

A mí, hacer terapia me salvó y me sanó. Me cambió literalmente la vida. Por eso amo mi trabajo: porque sé personalmente lo significativo que puede llegar a ser un proceso terapéutico y porque profesionalmente he tenido la oportunidad de ver en numerosas ocasiones los procesos de mejora tan bonitos y potentes que han llevado a cabo mis pacientes.